Cuando se lesionó la rodilla, el entonces jefe de los servicios médicos del Sevilla, Juan Ribas, dijo que había desaconsejado su fichaje por tener una rodilla "del alto riesgo". Guarente ha explicado hoy, un año después de aquella operación, que su articulación estaba bien, pero que tuvo mala suerte y ha lanzado un dardito a Ribas.
"Mi rodilla no estaba catastrófica. El año anterior a mi fichaje por el Sevilla jugué 40 partidos. Juan Ribas dijo eso cuando me lesioné. ¿Por qué no lo dijo antes o no explicó más lo de mi rodilla? Antes de lesionarme, él me dijo que me podía ocurrir al día siguiente o diez años más tarde. La mala suerte es que fue a los dos meses", ha comentado el italiano en sala de prensa.
Tiberio ha asegurado que "mi rodilla está perfectamente y lo que quiero es jugar. Estoy esperando entrar en una convocatoria cuanto antes, pero sé que está difícil jugar porque el mediocampo del Sevilla es muy bueno. No estoy para 90 minutos, pero el míster y yo estamos esperando el momento justo para que entre en una convocatoria".
Ha confesado que "ha sido un año muy duro y muy largo, porque entrenaba sólo y no sabía cuando iba a terminar esto. No me acordaba de que era futbolista, pero nunca pensé que me tendría que retirar".
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